Me gustó más el libro - Drácula

¡Hola otra vez criticones!

Dije que volvería pronto, ¿no? y no me gusta faltar a mi palabra, así que aquí estoy otra vez.

Ya sé que había quedado en no empezar una nueva sección en el blog, y no lo voy a hacer. Pero se me ha ocurrido que sí podría nombrar todas las entradas con el mismo título, y me ha parecido que "Me gustó más el libro" era perfecto. 

Y como no podía ser de otra manera, la primera entrada se la dedico a la película que me ha hecho empezar con toda esta historia: Drácula de Bram Stoker (Bram Stoker's Dracula).

El libro de Drácula de Bram Stoker lo leí hace tiempo por recomendación de un conocido al que le gusta mucho. A mí sin embargo, no es que me encantara pero sí que me gustó. Al principio me costó cogerle la marcha, no sólo porque esté escrito en forma de diarios y cartas, es que me costó meterme en la historia en sí. Recuerdo que me parecía algo complicada y no terminaba de comprenderla. Pero a mí no se me resiste nada y conseguí llegar al final del libro, final que no voy a desvelar pero que para mi gustó se quedó soso, corto, poco emocionante para el gran Conde Drácula. 

Pero, opiniones personales aparte, os recomiendo el libro a todos aquellos que no lo hayáis leído porque, aunque la trama no te guste especialmente, la forma en que está construida la historia me parece impresionante. Lo cierto es que desde que estudio Literatura Universal valoro y aprecio mucho más la estructura y técnicas narrativas de todo lo que leo.

Antes de empezar a comparar libro y película, aviso de que para esta comparación no me voy a basar en los hechos sino en las impresiones que éstos provocan. Me explico. No voy a valorar la película de Coppola basándome en si la adaptación es fiel o no a lo que Stoker narra en el libro, sino que voy a comparar las impresiones que me produjo el libro cuando lo leí (que como he dicho antes, fue hace tiempo y ya no lo tengo tan fresco en la memoria) con las que me ha producido la película, que acabo de ver hace un rato. 

Y es que entiendo que una película que se basa en un libro no puede ser 100% igual a éste, porque aunque novela y cine tienen mucho en común, también son muy diferentes, y no es lo mismo presentar una historia a través de unas cartas y diarios que representar esa misma historia con imágenes. 

Por el contrario, creo que se puede producir la misma sensación en el lector/espectador de distintas maneras. Pero precisamente esta película, desde mi punto de vista, no lo ha conseguido.

El libro me transmitió unas imágenes concretas de los personajes y la película me ha transmitido otras completamente diferentes. Sobre el matrimonio Harker apenas se habla en la película: Jonathan pasa totalmente a un segundo plano cuando si no fuera por él no existiría la mitad de la historia y por otra parte, se da una imagen de Mina que no es para nada la que yo tenía. Yo la tenía por una prometida fiel, que amaba a Jonathan por encima de todo y que despreciaba al Conde Drácula, y resulta que en la película pasa bastante de su prometido y esposo y pierde las bragas por el vampiro. Y si estoy en lo correcto, Mina no es la reencarnación de la difunta amada de Drácula, simplemente, por alguna extraña coincidencia es clavadita a ella.

Después tenemos al pobre Van Helsing, al que yo tenía por un respetable y curioso hombre que lucha contra los vampiros y cualquier otra manifestación del mal, y en la película me lo pintan poco menos que como un viejo loco. Algo parecido sucede con el Doctor Seward, que aparece como otro lunático medio drogadicto.

Termino con la hermosa e inocente Lucy, o por lo menos según el libro, en el que aparece abrumada porque debido a su belleza tiene varios pretendientes y no sabe a cuál elegir, porque según la película es una adinerada pero vulgar calientabraguetas.

Por último decir que la película presenta la historia con un elevado contenido erótico y en algunos casos, según un comentario de @marianotheboss en Series.ly, resulta demasiado "empalagosa". Y aunque yo no recuerdo tener esa impresión cuando leí el libro, no estoy del todo en contra. Es decir, prefiero la imagen de los vampiros de Coppola como seres violentos, sedientos de sangre y parcialmente erótico-sensuales, a los vampiros afeminados y asexuales de Stephenie Meyer, por mucho que Edward y Bella tengan una hija, fenómeno que nunca conseguiré entender.

Me despido por hoy diciéndoos que me encantaría saber vuestras opiniones tanto de la película o el libro de Drácula como de mi propia opinión.

¡Nos vemos pronto!

Miss Pupas♥