Hablando de recortes

¡Hola criticones! Después de otro parón de varios meses, vuelvo a interrumpir la historia que os estaba contando para escribir una entrada algo política. 


Antes de nada quiero decir que yo no me declaro partidaria del PP, ni del PSOE ni de ningún partido en concreto. Más que nada porque como todavía no puedo votar, no estoy muy enterada de estas cosas, y me hago un lío con lo que se supone que debería hacer cada uno según su ideología y demás. Aunque empiezo a tener una cosa bastante clara y es que, da igual qué ideología, sistema político o partido te parezca el correcto, aquí el que manda es el dinero. 


Como bien anuncia el título de este post (qué cool queda hablar con palabras de otros idiomas), voy a hablar de los recortes. También quiero decir que ni estoy a favor ni en contra de los recortes, un poco por el mismo tema que con la política en general, que aquí cada uno dice e interpreta lo que le da la gana, y yo no me acabo de aclarar. Pero sí que me gustaría dar un ejemplo muy cercano que me toca vivir. Y no, no es relacionado con la educación, aunque de eso también me gustaría decir algo al final.

Os cuento. En mi pueblo hay una banda de música que se creó hará ya unos 6 años y que funcionaba básicamente con las subvenciones del gobierno y con las cuotas de los socios. No somos muchos en la banda, pero hasta ahora hemos aguantado sin problemas. Ahora, con la crisis y los recortes, no salen las cuentas. Todavía tenemos que hacer una reunión para hablar el tema de manera oficial, pero como en todo, ya se empiezan a comentar cosas por ahí. Hace un par de días cuando nos contaron el problema nos dijeron que las soluciones eran o bien subir las cuotas, o bien recortar gastos. ¿Y sabéis qué fue lo que dijeron algunos miembros de la banda sin dudar un segundo? Recortar.


Y es que la realidad es que hemos estado viviendo muy bien hasta ahora (como dicen por ahí, hemos vivido por encima de nuestras posibilidades) disfrutando de cosas que igual no eran tan necesarias. Y mientras el Estado daba ayudas económicas para todo y para todos, la vida era de color de rosa. Y ahora que se empieza a acabar lo de chupar del bote, nos quejamos porque nos quitan dinero. 


Resumiendo, que cuando el país empezaba a irse a la mierda, no nos importaba porque nosotros seguíamos disfrutando de nuestros privilegios. Pero ahora que estamos hundidos en la miseria y nos quitan de las cosas personales de cada uno, ahora no nos gusta la situación, ahora nos quejamos y nos indignamos. Un poco sospechoso me parece a mí. Si estamos, estamos con todo, no sólo con lo que nos interesa. 


Repito que no estoy defendiendo los recortes que está haciendo el gobierno actual, pero digo yo, que si hay crisis y no hay dinero, de alguna parte lo tendremos que sacarlo. Que igual lo de recortar no está tan mal si recortamos de donde hay que quitar de verdad.


En cuanto al tema de los recortes en educación, no me quiero meter mucho por lo que ya he repetido antes, que como cada vez que pregunto me responden una cosa, prefiero no escribir para no meter la pata. Pero sí que quiero comentar algo sobre los encierros que están teniendo lugar en varios centros educativos. 
En mi instituto se ha organizado un encierro de profesores, padres y alumnos para este miércoles. Sinceramente, a mí esto de los encierros no me acaba de convencer. No les veo utilidad. No creo que a los políticos les importe mucho que unos profesores se queden en el centro fuera del horario lectivo (ya sea un día, como harán los míos, o un mes). Por lo menos si yo fuese uno de ellos, me la traería bastante floja. Vamos, como si se quieren quedar a vivir de por vida en el instituto. 


En fin, que te pones a hablar de política, aunque no tengas mucha idea, y se te pasa el tiempo volando. Me despido por hoy criticones, y os prometo que algún día terminaré de contaros mi historia.


Un besito ;)